
La tecnología de vigilancia de IA se está extendiendo más rápido de lo que nadie anticipó antes. Al menos 75 países líderes en todo el mundo están utilizando activamente tecnologías de videovigilancia inteligente que incluyen plataformas de ciudades inteligentes, reconocimiento facial y sistemas policiales inteligentes.
China es uno de los principales impulsores mundiales de la vigilancia de IA y suministra tecnología vinculada a empresas chinas como Huawei, Hikvision, Dahua y ZTE en 63 países. China no está sola. Varias empresas estadounidenses (como IBM, Palantir y Cisco) y otras de Francia, Alemania, Israel y Japón también desempeñan un papel clave en el suministro de tecnología de vigilancia de inteligencia artificial en más de 32 países.
Los gobiernos para emprender la videovigilancia inteligente tienen razones legítimas que no tienen su origen en su deseo de imponer la represión política o limitar las libertades individuales. La mayoría de los gobiernos utilizan agresivamente la vigilancia de IA para vigilar las fronteras, monitorear a los ciudadanos por mal comportamiento, detener a los delincuentes potenciales y sacar a los presuntos terroristas de las multitudes. La tecnología ayuda a las fuerzas de seguridad a disuadir actos dañinos, resolver amenazas potenciales y reaccionar en consecuencia.
Por ejemplo, en los EE. UU., un número cada vez mayor de ciudades ha adoptado sistemas de vigilancia de IA en los últimos años. Una investigación de 2016 realizada por Kim Hart de Axios reveló que la policía de Baltimore desplegó en secreto drones aéreos para llevar a cabo una vigilancia de rutina de los residentes de la ciudad y capturar imágenes aéreas de la ciudad. La policía también desplegó cámaras de reconocimiento facial para monitorear y arrestar a los manifestantes, particularmente durante los disturbios de 2018 en la ciudad. Una variedad de empresas de alta tecnología también tiene equipos de vigilancia avanzados instalados en la frontera entre Estados Unidos y México.
La vigilancia de IA ofrece a los gobiernos dos capacidades importantes. En primer lugar, la vigilancia de la IA les permite automatizar muchas funciones que antes se delegaban a los operadores humanos para el seguimiento y la supervisión. Esto genera rentabilidad, reduce la dependencia de las fuerzas de seguridad y anula los posibles problemas de lealtad principal-agente, donde las mismas fuerzas que operan a instancias del gobierno deciden tomar el poder.
En segundo lugar, la IA puede implementar efectivamente una red de vigilancia mucho más amplia que los métodos tradicionales. A diferencia de los operadores humanos con capacidad de atención limitada, los sistemas de IA nunca se cansan ni se fatigan. La vigilancia automatizada de IA puede funcionar en modo sigiloso. De esa manera, es posible que los ciudadanos nunca sepan si los bots están monitoreando sus mensajes de texto, leyendo sus publicaciones en las redes sociales o rastreando geográficamente sus movimientos por la ciudad.
Las siguientes son las técnicas clave de vigilancia de IA que los gobiernos utilizan en todo el mundo para respaldar objetivos políticos específicos y lograr una amplia gama de objetivos de vigilancia.
- Plataformas de ciudad inteligente/ciudad segura
- Sistemas de reconocimiento facial
- Vigilancia inteligente.
1. Ciudades Inteligentes/Ciudades Seguras
Se trata de ciudades urbanas con una serie de sensores que transmiten datos en tiempo real desde miles de dispositivos de seguimiento o vigilancia interconectados para facilitar la prestación de servicios, la gestión de la ciudad y la seguridad pública. A menudo denominadas “ciudades seguras”, incorporan sensores, cámaras de reconocimiento facial y cámaras corporales policiales conectadas a centros de comando inteligentes para prevenir delitos, garantizar la seguridad policial y responder a emergencias. También ayudan a las autoridades a gestionar la congestión del tráfico, dirigir los vehículos de emergencia a los lugares necesarios, fomentar el uso sostenible de la energía y optimizar los procesos administrativos. Las plataformas de ciudades inteligentes se implementan actualmente en al menos 56 países en todo el mundo.
2. Sistemas de reconocimiento facial
A diferencia del circuito cerrado de televisión común, que ha sido la joya de la corona de las fuerzas policiales durante 25 años, los sistemas de reconocimiento facial utilizan tecnología biométrica que usa una cámara (tanto de video como de imágenes fijas) para comparar imágenes existentes o en vivo de personas con imágenes de bases de datos. Estas cámaras ocultas o móviles pueden escanear rasgos faciales distintivos para crear mapas biométricos detallados de individuos. No todos los sistemas se centran en la coincidencia de bases de datos. Algunos sistemas agregan tendencias demográficas o realizan un análisis de sentimiento más amplio a través del escaneo de multitudes de reconocimiento facial. Aunque existe una creciente preocupación por el sesgo y los prejuicios algorítmicos, los sistemas de reconocimiento facial se están extendiendo rápidamente en todo el mundo.
3. Vigilancia inteligente
La vigilancia inteligente significa el uso de tecnología de análisis basada en datos para facilitar las investigaciones y la respuesta policial. Introduce inmensas cantidades de datos en un algoritmo (ubicación geográfica, datos biométricos, niveles históricos de arrestos, tipos de delitos cometidos, fuentes de redes sociales) para prevenir delitos, responder a actos delictivos o incluso hacer predicciones sobre futuras actividades ilegales. Un componente importante de la vigilancia inteligente es la creación de plataformas automatizadas que pueden facilitar la recopilación y el desglose de grandes cantidades de información de múltiples fuentes.
Actualmente, las técnicas policiales inteligentes se utilizan en al menos 53 países del mundo. La tecnología se aceleró en los Estados Unidos después de que el Instituto Nacional de Justicia comenzara a otorgar subvenciones para proyectos piloto de vigilancia policial predictiva en 2009. Los programas afirman predecir con notable precisión, en función de la agregación masiva de datos, dónde se cometerán delitos en el futuro y dónde es probable que las personas cometan. esos crímenes Sin embargo, existen preocupaciones crecientes sobre la efectividad de estas predicciones, sesgos y prejuicios.